La obra de este gran polifonista del Siglo de Oro español es un testimonio vivo de la profundidad espiritual y artística de su tiempo. Su primera etapa compositiva estuvo influenciada por quien fuera su maestro, Palestrina. Aunque, a diferencia de su mentor y del compositor franco flamenco Orlando di Lasso, Victoria acotó su corpus al género de las misas, motetes, himnos, salmos y magnificats, donde destaca su intensidad dramática, texturas densas, su cuidadosa atención a la declamación del texto y el uso expresivo del contrapunto.
De su corpus musical, debemos destacar los motetes O vos omnes y Vidi speciosam de 1572, el Officium hebdomadae sanctae (1585), las misas Ave maris stella (1576), O magnum mysterium (1592) y Leatatus sum (1600), y su obra maestra del renacimiento, Officium Defunctorum (1605). Una misa réquiem compuesta a modo de “canto de cisne” para las exequias de la emperatriz María de Austria y Portugal en 1603, concretamente, en el convento de las Descalzas Reales y en el Colegio Imperial de Madrid. Una obra maestra del Renacimiento donde el canto llano y la polifonía dialogan en perfecto equilibrio, transmitiendo a la audiencia una obra refinada, de expresión contenida y drama retórico.
Juana Mª Bolaños Polegre
Introitus, Requiem aeternam – Te decet hymnus
Kyrie – Christe à 4 (SSAT) – Kyrie
Graduale. Requiem aeternam – In memoria aeterna
Offertorium. Domine Jesu Christe [Hostias et preces]
Sanctus G Benedictus
Agnus Dei I (bis) & II
Communio. Lux aeterna – Requiem aeternam
Motectum. Versa est in luctum
Responsorium. Libera me, Domine – Tremens factus sum à 3 (ATB) –
Dies illa à 4 (SSAT) – Requiem aeternam – Kyrie
Lectio II. Taedet animam meam à 4 (SATB)